29 dic 2011

Pararse a pensar antes de despedir el año.

Estoy en ese pequeño oasis que dan las fiestas, entre cena y cena y felicitación y felicitación tengo un rato para sentarme a escribir unas cosas.
Hace unos cuantos meses, en una conversación que a priori no me apetecía escuchar, dije "mira, yo no hago planes, porque nunca me salen, las decisiones más grandes que he tomado, han venido de frente, así que no sé dónde estaré en 6 meses, ni en 2 días, ni qué querré". Y así son las cosas. Me he acordado de esa frase tantas veces...

 Ayer hablaba de volver atrás en el tiempo, de qué cosas cambiarías. Es difícil decir qué no harías de nuevo, cuando en realidad no sabes qué habría pasado si hubieras cogido la otra opción, si hubiera sido peor el remedio que la enfermedad. Como decía Eleno, no hay decisiones erróneas.

Ahora me encuentro con maletas, y con resultados de decisiones que no tomé, cosas que no planeé, pero que me hacen sonreír.

En esta última semana la gente tiene muchas preguntas que hacerme, o más bien son las 4 mismas preguntas pero mil veces repetidas. Qué pienso hacer cuándo me vaya, dónde voy a vivir, en qué voy a trabajar, y qué vais a hacer, y tú qué piensas, y dónde será lo siguiente...

Y mi respuesta es amablemente la misma que hace unos meses: no lo sé. Pero espero lo mejor. Y este año me lo merezco, que he sido muy buena. QUERIDOS REYES MAGOS:...

23 dic 2011

"¿Quién decide hoy en día qué es arte?"

Hace poco me preguntaron en una conversación quién pensaba yo que manejaba el arte contemporáneo.
La pregunta del millón.
Esto es algo que a veces me preguntan y lo primero que pienso es "¿Cuánto tiempo tienes?".
Para resolver esta pregunta en NY dí 10 millones de vueltas y no quiero ni pensar los libros que leí. Porque al final, mi trabajo de investigación iba de algo que me dí cuenta después, respondería esa pregunta.
Pasé de intentar averiguar la relación existente entre las creaciones y motivaciones de los artistas emergentes y el mercado del arte contemporáneo.
Partimos de la base, y esto es importante, de que no es lo mismo el mercado europeo, que el americano (no digo nada del asiático, y no digo nada porque no lo conozco). Pero al final la base es la misma, los contactos, el dinero.
Desde el punto de vista del comprador, quién tiene el poder en USA. Pues mediante mi experiencia yo diría que 3 comunidades básicas todas ellas de un poder adquisitivo ya no holgado sino alto.
Judíos, Gays y Críticos (3).
Dentro de estos grupos en muchas ocasiones encontramos a los galeristas.
Recuerdo particularmente la respuesta de uno de los artistas que entrevisté. Era un chaval que hacía flores. Podría extenderme un poco más en su técnica, pero para el caso de esta historia es innecesario (y para la historia del arte también). Era un chico muy majo que vivía en Brooklyn, y vino a traer una pieza que había vendido, un gran formato a la galería.
Entre otras preguntas, una de las que hacía era: ¿Por qué elegiste esta técnica y este estilo?
Y el chico amablemente me contestó: Porque vende.
Luego me contó que el trabajaba en no se qué historias de muebles, y bueno, le parecía bonito lo que hacía y vendía bien, que no tenia ningún significado más.

Con esto me acordé de un profesor que en primero de carrera nos decía que el arte no tiene porqué significar nada, ni tener ningún motivo, que no necesita justificación. Y que tan arte era un cuadro de hotel de carretera como un Cézanne... en fin, de esa opinión ya hemos leído mucho, no?
Toda esta historia viene a que leí un artículo en El País que se títulaba "la guerra del lujo es puro arte", en el que se comentaban ciertas circustancias dentro de los altos manejos del mundo del arte aquí en Europa.

El otro día comentaba yo, que a buena parte de esos grupos compradores (que cambian de perfil según la zona de la que hablemos del mundo y del país), el arte les da estatus, a compradores, a vendedores y a artistas. Es una moneda de cambio: Tu fortuna puede venir de la cosa más ridícula o incluso vergonzosa, pero no te preocupes. Compra arte y entonces directamente subirás al estatus de mecenas.
Si en cambio decides que tu apellido se conozca por galerista y no por galletero, porque tienes algún tipo de trauma con las galletas, pollos, leche, plásticos o lo que sea que comercializara honradamente tu familia, no te preocupes, tú puedes ser un galerísta si lo deseas.

En uno de los párrafos del texto la comisaria Maria del Corral describe:

"Pinault tiene poder y lo utiliza", sostiene De Corral. "Tengo la impresión de que compra cualquier cosa que exceda de tamaño normal. Arnault es diferente. Es más discreto, y se conoce poco su colección. Y la de Prada que se vio en la Bienal de Venecia me parece muy interesante".

Se refiere a Pinault, a Arnault, A Prada...a las empresas y empresarios que manejan ahora o pretenden controlar el mercado europeo. Habla de su criterio estético a la hora de comprar. Apasionante, ¿verdad?

Apunto varias perlas del texto con el que comulgo, porque me lo creo, pero no apoyo. Del artículo se puede decir mucho, y la verdad es que da algunos datos curiosos que nos sirven para analizar un poco la psicología de los nuevos mecenas:

"La personalidad de estos magnates si filtra en los monumentos a sí mismos".
"Las expsociones en Palazzo Grassi o Punta de la Dogana pueden hacer que un artista sea conocido de inmediato"
"Hay galerias que prestan mucha atención al gusto de Pinault, como dijo un crítico, él es un creador de opinión" 

Yo ruego una lectura del texto, un punto de crítica más allá de "el mercado es necesario" "mientras compren el mundo del arte por lo menos podrá sobrevivir".
Me pregunto, y aquí lo dejo, si esta lucha de intereses es en el fondo tan productiva para el arte como se dice, o tan devota.
Sé, como todos, que la historia del arte se ha basado en comerciantes, mercaderes, nobles, instituciones y demás poderosos que por medio del arte se han hecho un nombre, una imagen o han envuelto la que no querían que se viera. Sé de la manipulación del arte como sabe todo el mundo. Pero me pregunto si era mucho esperar un pequeño avance evolutivo en este sector.